Las personas estamos cambiando constantemente, cambiamos a medida que crecemos y nos relacionamos. De todo se aprende, de lo bueno y lo malo, todo nos cambia continuamente, en mayor o menor medida. No solemos darnos cuenta hasta pasado un tiempo y echamos la vista atrás.
Me estoy dando cuenta de mis cambios, unos me gustan, otros no tanto y otros los odio. Y todo lo malo que he querido cambiar siempre ahí se mantiene.
Ha sido mucho tiempo haciendo las mismas cosas, frases, gestos, guiños, juegos ... y de un plumazo se me han ido. Ahora sigo con algunas de mis cosas que las tengo como grabadas a fuego y no creo que se me vayan nunca porque es parte intrínseca de mi, pero es increíble como nos adaptamos cuando crees que no podrías vivir sin algo o alguien y cuando lo pierdes al final la mente logra adaptarse. También es increíble como influyen otras personas en tu comportamiento de forma que pueden cambiarte por completo.
Pienso en las cosas que hacía, lo que decía, lo que veía y lo que pensaba de ciertos temas (es decir, quien era yo antes) y ahora soy alguien diferente.
Lo que yo quería exponer es la facilidad con la que cambiamos y lo importante que son algunas personas para ser lo que somos, porque sin ellas no somos nosotros, damos otro paso, evolucionamos y nunca seremos los de antes porque simplemente las personas que estan ahora son diferentes.