sábado, 31 de diciembre de 2011

Feliz Nochevieja


No doy crédito, hasta hacía unas horas pensaba que iba a ser una noche de mierda más, pero algo ha cambiado, alguien está conmigo que me llena de vida otra vez. Es un cabrón si, pero es de los pocos que me entienden; me hace salir a dar un paseo para que no me quede en casa, se enfada y se indigna cuando no le hago caso, se acuesta conmigo en la cama cuando duermo la siesta y se pone bajo mis pies cuando estoy escribiendo esta basura. Si pico algo de comer viene a pedirme, me pone las patas encima o me empuja con el morro y si le miro y no le doy se vuelve a enfadar. Le gusta que lo coja y lo ponga en mi regazo mientras le toco la barriga y se queda frito. Aunque le huela el aliento a cloaca me da besitos en la oreja y roza su cabeza contra mis piernas. Es una parte de mi que ahora está conmigo y aunque no estaremos mucho tiempo lo pienso disfrutar, porque parece mentira que algo tan pequeño pueda llenarte tanto.
Este es Bolton, mi perro, mi niño, mi parte de mi.

D.E.P. 24-10-1999 - 29-10-2016

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Sin ilusión por vivir


No sé muy bien como empezar ante un título así, ahora me doy cuenta del morbo al leerlo y parece más una técnica de esos programas del corazón sin escrúpulos.

Recuerdo las conversaciones que tenía con mi abuelo, las echo de menos. Siempre me han gustado sus batallitas y mientras él hablaba y hablaba yo escuchaba. Quizá sea eso sumado a mi paciencia lo que hace que sea alguien que sabe escuchar. El tema es que mientras otras personas pensaban "Que coñazo, ya está otra vez contando sus historias" yo disfrutaba cuando me contaba sus experiencias en el servicio militar que al presentarse su nombre no aparecía en ninguna lista y que le cambiaban el apellido siempre.
Recuerdo también que muchas veces me decía que estaba cansado de la vida, me decía que él ya había vivido todo lo que tenia que vivir y no le gustaba el mundo donde estaba. Quería morirse. Me lo decía así de claro, con lágrimas en los ojos, directo.
Yo en aquel entonces no lo entendía, pensaba que era una actitud bastante egoísta, me resultaba duro oirle decir aquello, pero con el paso del tiempo lo fuí entendiendo. 
Mi abuelo era de otra época, eran otros tiempos, donde la vida seguía siendo igual de injusta pero no era el disparate en que se ha convertido ahora. Había cosas que no entendía, para él, todo había cambiado para peor, ver las noticias lo alteraban y lo único que le gustaba ver eran los concursos esos de preguntas o adivinar las palabras. Sentía que no encajaba, como cierta persona que conozco, cuando esta en la discoteca, le viene un momento de lucidez y cae en la cuenta de que no le gusta bailar y de repente se ve desde fuera él y el resto, como agua y aceite.
Puedo entender que cuando se llega a cierta edad uno se canse de vivir por varias razones: porque ya no puede hacer las cosas que hacía antes, porque te tienen que ayudar a hacer cosas que tu mente todavía cree que las puede hacer, que estés con dolores de la propia vejez y sea un sufrimiento constante, te hinches a pastillas por diferentes dolencias, se te vaya la cabeza ... o por que no encajes en esta vida. Puedo entenderlo porque a veces me canso de ella también, porque siento que tampoco encajo aquí. 
Ojalá exista otra vida y pueda sentarme a su lado en el sillón y poder escuchar sus historias de nuevo. Me gustaría poder abrazarle y decirle que le echo de menos y a sus batallitas también, decirle que por fin le entendí y que, en su lugar, también me hubiera comido la morcilla que le durmió para siempre.

lunes, 26 de diciembre de 2011

La Amistad


Ya ha pasado el día de Navidad y no quiero meterme en la cama sin antes dejar algo escrito sobre una cosa que considero muy importante, quizá más que tener a tu pareja estable aunque menos que la familia: La amistad
No estoy hablando del conocido, ni del colega, ni de ese que ves cuando sales de fiesta,  ni con el que te partes el culo cuando sales a tomarte algo, ni con el que hablas todos los días y os contáis vuestras intimidades. Me estoy refieriendo al Amigo de verdad, ese que no te falla nunca, que cuando estás hundido en la mierda no se conforma con tirarte una toalla para que te limpies si no que se arremanga y se mete a sacarte. Esos que te lo han demostrado una y otra vez, y siguen demostrándotelo. En fin, amigos de esos que puedes contar con los dedos de la mano. Personas con las que tienes algo especial, un vínculo invisible, una conexión increíble, de esas que pondrías tu vida en sus manos sin vacilar.
Desgraciadamente te sueles dar cuenta cuando, después de alguna dificultad de la vida, te giras y ves los que están y los que se han ido. Cuando realmente necesitas ayuda ellos te la ofrecen porque les sale del corazón. Me refiero a esa amistad en concreto, porque hoy en día se ha banalizado la amistad, todo el mundo tiene 200 amigos del alma, es verdad, los tienen en el Facebook, y con estella incluso. Ya no te hago amigo, te borro, así de facil.

Por la parte que me toca, mis amigos no paran de demostrarme continuamente que puedo contar con ellos, por lo que me siento muy agradecido y afortunado. No me considero un buen amigo, sé que tengo que mejorar mucho para ser como ellos, pero lo intento y sé que alguna vez podré devolverles todo lo que me han dado.
No sé si alguna vez lo llegarán a leer (¿me lee alguien acaso?) pero a todos ellos, que ya saben ellos quienes son, muchas gracias por arremangaos y venir a sacarme de la mierda.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Triste Navidad



Fiesta Cristiana en la que se celebra el nacimiento de Jesucristo en Belén. Realmente no se ponen de acuerdo en la fecha real, parece ser que la sitúan en primavera pero la Iglesia la mantiene el 25 de Diciembre.
En este día se supone que aparece un hombre gordo y seboso, con cara de bonachón que reparte regalos a diestro y siniestro entrando por la chimenea, balcón o, en su defecto, ventana. Personaje inventado y basado en un obispo cristiano llamado Nicolás de Bari en el año 280 d.c. , que ha ido evolucionando en aspecto y vestimenta a lo largo de los años hasta que la Cocacola lo pintó de rojo y así ha quedado hasta la actualidad.
Recuerdo que nosotros no teníamos regalos en Navidad, pero nos encantaba el "espíritu Navideño", toda la parafernalia de montar el arbolito, recuerdo algún Belén y sobretodo que veíamos a toda la familia, las comidas, el turrón y las porquerías. Por no mencionar los días sin cole hasta pasado Reyes.
Eran otros tiempos, otras sensaciones, era ... diferente. No sé si es por la edad, pero hace tiempo que no tengo esa ilusión, la forma de vivirlo no es la misma. ¿Será parte del proceso de envejecer? ¿Será que ahora soy más conciente de que todo es puro teatro? ¿Que la gente que se ve tan feliz reunida en familia, en realidad no se traga la una a la otra? Noto mucha hipocresía y demasiado consumismo desde hace ya tiempo, ¿era así cuando era niño pero no me daba cuenta? 
"Felices fiestas!" se van diciendo unos a otros con total normalidad cuando a lo largo de todo el año no has cruzado una palabra con ellos, no has visto a nadie o te llevas a matar. Sería bonito que este día sirviera para olvidar y perdonar; que este día la gente hiciera un esfuerzo por querer arreglar las cosas pendientes que pueda tener; que este día pudiera hacer que la gente intentara ser feliz de verdad y no de puertas afuera. Como pasa en los cuentos. Olvidarnos de las compras, de cambiar un beso, un abrazo o un "Te quiero" por una consola, un reloj o una colonia. Creo que la esencia de lo que significa la Navidad se ha ido perdiendo, mi duda es que no sé si alguna vez existió.
En cuanto a mí, es el día de mi santo aunque nadie se suele acordar. No digo nada y me pregunto divertido quien es el que caerá en la cuenta. A última hora se oye por el fondo: "Oye, Noel no hace fiesta hoy?" y entonces viene una avalancha de disculpas y felicitaciones que me dejan con cara de "si, si, ya vale ya ...". Sinceramente me da igual, no le veo el sentido a celebrar un santo y tampoco me suelo acordar cuando cumplen los demás, lo veo algo inútil.
Pero si me gusta cuando nos juntamos todos, somos una familia que nos queremos mucho y nos llevamos muy bien, siempre hay cachondeo y para mí es de los mejores días del año... menos este.
Me falta media parte, la que hacía que levantarme por las mañanas tuviera sentido, el motor que me hacía mover, el corazón que me hacía vivir. Después de muchos años llego sin ilusión, me encuentro raro y no me gusta en lo que me he convertido. Esta es la peor Navidad de mi vida, pero quiero creer que el año que viene (si no se acaba el mundo) sea la mejor que viviré siempre.

viernes, 23 de diciembre de 2011

El perro del vecino


Nunca lo ví, no sé que raza es ni si quiera si es grande o pequeño. Sé que está ahí porque llora, aulla como un lobo y forma extraños sonidos, graves y agudos. Un llanto agónico, lastimero. 
Cada mañana cuando lo dejan solo se llena de pena y se hace oir, vaya si se hace oir. No es que me moleste, al contrario, me da mucha lástima, porque sé como se siente.
Me gustaría tranquilizarlo y decirle que en unas horas sus amos estarán de vuelta y podrá chuparles la cara y recibirá sus palmadas en el lomo o le rescarán detrás de las orejas. Y si son buenos amos le diran: "Nos vamos?" y le pegarán el paseito del mediodía. No hay nada más agradecido que un perro, aún cuando no nos portamos del todo bien con él siempre estará ahí. Quizá tenga algo de perro, siempre me he llevado bien con ellos y a veces los entiendo mejor que a las personas, es posible que en otra vida fuera uno. Dicen que todos los perros se entienden, me entenderá el perro del vecino el día que se lo explique?

jueves, 22 de diciembre de 2011

Palmeras de chocolate


Lo he vuelto a hacer, después de más de un año no he podido resistirme. Como cuando un fumador prueba el primer cigarrillo después de haberlo dejado un tiempo atrás, he sentido ese "Joder, que bien me ha sentado". No sé si seran las fiestas, un sentimiento de culpa por ayer o ambas cosas. La cuestión es que al entrar en la panadería se paró el tiempo cuando las ví, todas juntitas en su bandejita. Habían 3 tipos de palmera expuestas: las sosas (sin chocolate), las cool (chocolate blanco y trazos de chocolate negro) y las clásicas (chocolate negro). Yo, hombre clásico, siempre he tenido debilidad por estas últimas y aunque el blanco me tire más, en lo que a palmeras se refiere no hay punto de comparación. 
La verdad es que había una competencia feroz: cremadillos de crema, pastelitos varios, merengues, coca de trampó, empanadas de carne... calorías a tope, pero lo tenía decidido, hoy iba a desayunar duro. Es lo que tiene quedarse sin leche y no pensar en comprar, seguramente mañana vuelva a estar sin y tenga que buscar otras alternativas más saludables. Como el bocadillo de la vieja, por ejemplo.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Piscis

Sí, soy Piscis. Buscando por internet y lanzado por la curiosidad de saber si aciertan con esto de los signos del zodíaco encontré tal descripción:

Descripción

          "Un piscis tiene una personalidad tranquila, paciente y amable. Son sensibles a los sentimientos de los demás y responden con simpatía y tacto al sufrimiento de los demás. Son muy queridos por los demás porque tienen un carácter afable, cariñoso y amable, y no suponen una amenaza para los que quieren tener puestos de autoridad o mayor popularidad. Suelen asumir su entorno y sus circunstancias, y no suelen tomar la iniciativa para resolver problemas. Les preocupan más los problemas de otros que sus propios problemas.
          Los Piscis tienden a existir de forma emocional más que de forma racional, de forma instintiva más que de forma intelectual. No les gusta sentirse confinados y no respetan las convenciones así por las buenas. Pero tampoco tienen la energía o la motivación para luchar contra el poder establecido.
          Los piscis muchas veces se retiran hacia un mundo de sueños en el que sus capacidades pueden aportarles beneficios. Tienen una gran capacidad creativa artística."

En el trabajo

          "Un piscis rinde más si trabaja solo o en puestos inferiores. Los piscis no suelen ser buenos gestores, porque carecen de la suficiente seguridad para serlo. Pero son excelentes secretarias, auxiliares o administrativos.
          También hay muchos piscis que se convierten en excelentes abogados, arquitectos, viajeros, artistas, curas, empleados en organizaciones sin ánimo de lucro (por su sentido de solidaridad), detectives (por su imaginación) etc."

Las Relaciones personales

          "Los piscis no son egoístas en sus relaciones personales y suelen dar más de lo que reciben en sus relaciones personales. Son personas leales y buscan una unión con la mente y el espíritu de su pareja más que una unión sexual. Les gusta el hogar y la familia."

Leyendo esto y curiosamente viéndome tristemente reflejado, confirmo (lo sabía) que soy completamente gilipollas. Por lo menos me queda el consuelo de saber que parte de esa gilipollez viene ya marcada por los astros, sus alineaciones ascendentes y su puta madre. 

Ahora que ya estoy liberado de esa carga, voy a retirarme a mi mundo de fantasía donde soy un magnífico cura que reparte ostias a todo pecador de la pradera. Y si son muy malotes, los parto en dos con mi sable láser color rojo oscuro mientras grito: "Arrepentíos pecadores! Soy la mano del Señor que reparte por fin justicia en este mundo de mierda!" 
Quizá sea una ida de olla a estas horas de la noche (no lo discutiré), pero es meterme en ese mundo fantástico y me quedo frito oye.

martes, 20 de diciembre de 2011

Canción del Lunes - Y sin embargo te quiero


Con Joaquín Sabina nací, crecí, me enamoré, fui feliz, me partí en dos, me recuperaré y moriré. Unas de esas canciones que te ponen el nudo en la garganta. Siempre la recordaré al oirla, porque son especiales las dos y pase lo que pase quiero seguir escuchándolas. Y sin embargo te quiero.
Lunes triste y bajando, la cuenta atrás ya empezó.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Manualidades Art Attack


Hoy tenía ganas de hacer unas manualidades, bueno, ganas ... ganas ... no tenía, pero era algo pendiente desde hace ya tiempo y hoy me he decidido. 
Me he ido a los chinos y me armado de tijeras, celo, rotulador, bridas y unos cartelitos muy monos donde uno pone su número de teléfono para que te puedan contactar en caso de interés.
Dispuesto a ello me enzarzo con los letreritos, poniendo celo por aquí, celo por allá, rotulador que pintaba intermitentemente y tijeras del Real Madrid (No vendían de otro equipo, curioso).
Voy a la cocina y cojo uno de esos cuchillos que he empleado cientos de veces, el de la hoja curva, no era el ideal, pero cuando lo he visto ahí junto con los demás, tantos recuerdos me han venido que no he podido resistir elegirlo a él. Los agujeros no quedaban perfectos ni mucho menos (la hoja curva) pero servían para la siguiente fase: el colgado.
No era tarea fácil colgar el letrerito: la valla de cañas, el viento infernal, el fresquito y la vista aguada no ayudaban a terminar con éxito. Me fijé que en las jardineras; donde dejamos hierba muerta y tierra revuelta habían salido brotes verdes. Me pregunto si eso será alguna señal de las que a veces te hace la vida y nunca sabemos verla. "Brotes Verdes" "Esperanza" Pero no podía entretenerme porque me estaba congelando mientras peleaba con el viento y el letrero. Es como si desde arriba no quisieran que lo colgara y me mandasen fuertes vientos para impedírmelo, pero cuando algo se me mete en la cabeza, no hay Dios que me pare hasta que lo consigo y él sabe que es verdad. 
Así que empecé a meter las bridas por detrás de los barrotes y pasarlas por los agujeros que había hecho en el cartel, que por cierto, algunos agujeros no los hice suficientemente grandes y no pasaba la puta brida, con lo que todavía dificultaba más mi tarea. Cuando conseguí poner las 10 bridas en sus respectivos agujeros no podía imaginarme lo que iba a pasar a continuación: a medida que iba tirando de las bridas para atar bien el cartel se me iban rompiendo una a una. ¿Como es posible que se rompa una brida sin hacer fuerza siquiera? ¿Es que las bridas chinas tienen un mecanismo de emergencia que hacen que se rompa a la más mínima presión? La cuestión es que tuve que cambiar 6 de 10 pero ya estaba el logro hecho. Alcé el puño desafiante al cielo, "No has podido conmigo" pienso orgulloso; otra vez más le gano la partida a ese viejo cabrón. 
Salgo y miro al pasar el cartel colgado en el balcón, me recordó la época que estábamos buscando una casa, cuando al ver uno de estos enseguida nos venían las mismas preguntas: "Cuanto pedirán?", "Es buena zona?", "Como sería nuestra vida ahí?", "Por aquí podrá mear a gusto nuestro perro?". Toneladas de ilusión, años felices. Pues ahora estoy en el otro lado del espejo, queriendo quitarme de encima una parte de mi vida. 
Pero el cartelito estaba puesto de puta madre, que era mi misión esa mañana. Lo hice, otra vez. No sé si las bridas aguantarán mucho tiempo mi obra maestra, solo sé que cuando consiga venderlo, seré la persona más feliz y más triste de este mundo.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Desilusión


Desilusión: Impresión negativa que experimenta alguien al comprobar que la realidad de algo no responde a la esperanza o la ilusión puestas en ello.

Es lo que se siente cuando crees que conoces a alguien que has querido demasiado y empiezas a ver cosas que no cuadran y te descolocan hasta tal punto que no reconoces a esa persona.

También se siente cuando das, das, das y no recibes, ya no lo que te esperas, si no que no recibes absolutamente nada.

Antes mataba, despues dolía, luego escocía y ahora es pura desilusión.

martes, 13 de diciembre de 2011

Conectando

  "Hacen que parezca muy fácil, conectar con otro ser humano. Parece que nadie les ha dicho que es lo más difícil del mundo." Dexter Morgan. (Remember 07/08/2011)
Cierto, hay gente que busca el amor desesperadamente, por todas partes a cualquier precio. Hay quién ha tenido la suerte de encontrar el amor y conectar, hay quien conectó y desconectó (o lo desconectaron) y hay gente que ama pero no ha conectado nunca.
Creo que es más importante conectar con alguien, ese click que te dice que esa persona vale la pena conocer, que te entiende y la entiendes, que con solo mirarla sabes que está pensando, si está enfadada, si es feliz ... , saber que decirle para levantarle el ánimo o para hacerla reir. Porque el amor puede venir después ... o no, pero tener esa complicidad maravillosa es lo más difícil del mundo.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Mi amigo Rogelio el Burro


Durante mi primera salida oficial autista vino a saludarme Rogelio, un maravilloso ejemplar de Equus asinus, es decir, de burro. Lógicamente no se llama así, no sé si tendrá nombre alguno, pero sus ojos me dijeron que le gustaba el nombre o por lo menos que alguien le llamara de alguna forma. 
Rogelio estaba solo, aburrido, comiendo unos hierbajos rancios que sobresalian de al lado de un cubo de madera. Me vió pasar y levantó los ojos, como quíen escucha algún ruido raro y trata de concentrarse en divinar de donde viene. 
Me paré en frente y curioso se acercó a mi, lento y cauteloso, dispuesto a saludarme. Pronto entendí que no era un saludo lo que quería, ni que le acariciara el morro, ni que le rascara las orejas (es lo mejor que le puedes hacer a un burro), Rogelio venía a mi porque tenía hambre. Buscaba mi mano, me daba mordisquitos en los dedos con los labios dejandome babillas y la mano pringosa. 
Me despedí de él y cuando me alejaba me rebuznó, un sonido lastimero que me partió el alma, no sé si fue regañándome por no darle nada de comer o porque me iba y lo dejaba solo otra vez. Me giré de nuevo a él y le prometí que cuando vuelva por Banyalbufar, pasaré a saludarlo otra vez con dos manzanas golden de regalo. Dicen que estos animales son muy inteligentes, no sé si fue por eso, pero paró de rebuznar, incluso pude ver una sonrisa de camadería. Supe enseguida que nos habíamos hecho amigos, espero que me recuerde cuando lo vuelva a ver de nuevo, o por lo menos cuando le dé las dos manzanas golden.